Cuando el tío Tom y otros esperaban ser subastados en un almacén de esclavos en Nueva Orleans, Harriet Beecher Stowe soliloquizó ante el horror de que los seres humanos fueran vendidos como propiedad:“Esa alma, inmortal, una vez comprada con sangre y angustia por el Hijo de Dios, cuando la tierra tembló, y las rocas se rompieron, y las tumbas se abrieron, se puede vender, arrendar, hipotecar, cambiar por alimentos o productos secos, para adaptarse a las fases del comercio, o la fantasía del comprador”.
Pablo luego de exhortar a esposas-esposos y hijos-padre, se refiere a este tercer grupo de personas y que también deben manejar una relación que refleje a Cristo, esto es siendo siervos o amos. No es solo en el núcleo familiar donde se debe reflejar a Cristo, si no que aun en las relaciones meramente laborales. Nuestra identidad en Cristo va mas allá del tipo de relación que estemos desarrollando o en donde estemos en determinado momento. Como la cita del inicio, nosotros no podemos pensar hoy que por estar en una relación laboral o de negocios podemos adaptarnos a esas circunstancias para obtener cierto provecho. Por el contrario, el llamado de Pablo a la iglesia en Efeso, y hoy a nosotros, es que aun en el trabajo debemos practicar nuestra identidad en Cristo.
Veremos 2 exhortaciones (dos mandatos) dado por Pablo a este tercer grupo (Siervos - Amos)
1.- Siervos: Obedecer de maneras:
- Respeto
- Sinceridad
- Como a Cristo
- No sirviendo para ser visto
- Sirviendo como al Señor
- Con una buena actitud
2.- Amos: Hagan lo mismo
V.5
SIERVOS, OBEDECED [...] COMO A CRISTO
Siervos = Douloi que quiere decir “esclavo”, a este grupo de personas Pablo esta llamando a la atención.
Se estima, históricamente, que al rededor de un 35% de la población del imperio romano era esclava. Esta era un practica muy común y formaba parte de la organización socioeconómica de la época. Los esclavos eran personas que habían sido comparadas y que perdiendo toda su libertad debían su vida en servicio a quien ahora era su dueño. Algunas consideraciones que se deben tener de la esclavitud en tiempos de Jesús:
- No existía factores raciales.
- Se podía esperar una futura liberación (esto incluso estaba regulado por la leyes romanas)
- Los trabajos iban desde la labores domesticas, de campo a incluso tener profesión, como un medico. (Incluso se les cancelaba cierto sueldo)
- Recibían educación y/o capacitación en ciertas áreas.
A pesar de que este esclavitud era mucho mas humana que la actual o la del siglo 17 -18, finalmente los esclavos estaban privados de libertad y de derechos (no se podían casar, no podían tener hijos) incluso están siempre expuestos a cualquier tipo de castigo si así lo consideraba el amo. Séneca, en sus escritos habla en favor de un trato amable y humano hacia los esclavos, pero también se manifiesta a favor de la necesidad de los azotes.
A este grupo de hermanos, Pablo se dirige (mostrando su preocupación por ellos y demostrando que ellos eran miembros aceptados dentro de la comunidad) y hace un llamado a comportarse como es digno de su mas importante identidad, no la de esclavos si no como la de hijos de Dios. Así es como Pablo comienza a detallar como es que los esclavos deben de relacionarse con sus amos. En el contexto actual debemos de comprender que gracias a Dios ninguno de nosotros es esclavo, pero a pesar de eso, la posición que mas se acerca y esa realidad es la de empleado o trabajador. Nuestros jefes hoy no puede ejercer el castigo como en la antigüedad por que hay leyes que ordenan el trato laboral. Pero un así, los principios que Pablo les da a los siervos son ampliamente aplicables a los trabajadores de hoy.
(1) Los siervos deben tratar con temor y temblor a sus amos. Dicho de otra forma con respeto y temor (con un angustioso temor), a pesar de que quizás no se lo merecieran, el trato respetuoso y con temor debe ser parte de nuestra conducta. Debemos de tener la actitud de querer cumplir lo que el amo (o jefe) esta ordenando, con el temor de no cumplir lo que me esta mandando.
(2) Los siervos deben ser sinceros (sencillos) de corazón, limpios de cualquier tipo de motivación inadecuada. No debe haber malas intenciones en el servicio o actuar en base a artimañas o engaños.
(3) Como a Cristo, es la manera de obedecer. Los siervos deben comprender que finalmente su lealtad final se debe a Cristo como su amo final o supremo (1 Pedro 1.18-19). Con la misma devoción que se sirve a Cristo se debe de obedecer a los amos. (Colosenses 3.17)
V.6
NO SIRVIENDO AL OJO [...] HACIENDO LA VOLUNTAD DE DIOS
(4) No sirviendo al ojo (para ser vistos). Los siervos cristianos deben repudiar cualquier tipo de labor que sea ejecutada solo para ser vistos. Lo que se demanda del siervo es que el debe de servir de manera eficaz o con excelencia este siendo visto o no por su amo. Finalmente el comportamiento como el servicio son igualmente importantes. El querer hacer las cosas solo para quedar bien, muestra el orgullo y la vanagloria de quien obra de tal manera.
(5) Haciendo la voluntad del amor. El servicio a los amos terrenales finalmente esta a la sombra del servicio que damos a Dios. Este es el “contrato” o “el amo” que debe motivarnos para servir bien a los amos terrenales. El deber de los creyentes se debe a quien esta por sobre todas las cosas (Efesios 1.20-23) y en quien en definitiva tienen su identidad. La posición de esclavos o de trabajadores no nos libra de la mayor prioridad u objetivo de ser hijos de Dios, que es cumplir su voluntad; dicho de otra manera, no importa donde estés, que titulo o trabajo estés desempeñando, debes cumplir la voluntad de Dios, con la actitud correcta “de corazón” (Deuteronomio 10.12-13).
V.7-8
SIRVIENDO [...] SEA SIERVO O SEA LIBRE
(6) Con una actitud correcta. A los amos se debe servir con una actitud de benevolencia, con una actitud positiva o con animo pronto. Para lograr esto repite o alude a lo que ha mencionado anteriormente, no mirando a los hombres, si no a Dios, que es a quien finalmente debemos un servicio de una buena actitud con toda nuestra vida. Si servimos de buena manera a los amos terrenales de la misma manera estamos sirviendo a Dios (Romanos 6.17-18).
Esta buena actitud mostrada hacia los amos o jefes, sera bien retribuida. Dios la recompensara o nos bendecirá . Si actuamos de las 6 maneras o bajos los 6 principios que Pablo esta manifestando Dios recompensara a sus hijos. Así como los esclavos podían recibir castigos, Dios “premia” o reconoce por medio de sus bendiciones a aquellos esclavos de el que obran conforme a la voluntad del amor eterno (Marcos 9.41). Todas nuestras obras serán recompensadas (2 Corintios 5.10; Colosenses 3.25).
Esta realidad espiritual es tanto para los siervos como para los libres. Lo que conecta con la el subgrupo que Pablo nombra a continuación.
V.9
Y VOSOTROS, AMOS, HACED [...] NO HAY ACEPCIÓN DE PERSONAS
Ahora, Pablo se dirige a los Amos o Jefes. A los amos cristianos Pablo manda a “haced lo mismo” que lo que esta ordenando a los esclavos. Los mismos principios o actitudes virtuosas deben de ser reflejadas por el amo. El practicarlas involucrara dejar de lado las amenazas y con ello, los castigos duros a los esclavos.
La motivación o razón del mandato, es que ambos (siervos y amos) tienen al mismo Señor, en definitiva ambos son esclavos de Dios, por lo que se deben a un trato digno y que refleje a Dios. Si Dios (el amo de ambos) todopoderoso, sentado en el Cielo, no hace acepción de personas (Deuteronomio 10.17) ¿por que hacerlo nosotros? (Santiago 2.1). Todos se merecen el mismo trato, sincero, amable, puro, etc.
CONCLUSIÓN
Por lo tanto, en medio de la relación de esclavos y amos, debe existir la motivación central y suprema de que Dios es amo de ambos y eso es motivacion y razón suficiente para mostrar un trato amables o respetuoso, sincero,sirviendo a Cristo, no sirviendo para ser visto, cumpliendo la voluntad de Dios, y con una actitud benevolente. Estas 6 virtudes o principios son los que deben modelar nuestra relación laboral, independiente si una de las partes no es creyente, recuerde que no hay acepción de persona y la manera en que usted se comporte o conduzca en su trabajo, primero glorificará a Dios, y segundo, puede ser la manera en que los inconversos lleguen a las plantas de Dios.
Hermano tu que eres trabajador o que tienes a cargo a un grupo de personas, glorifica a Dios en tu trabajo, siguiendo los que Dios hoy nos manda. RECUERDA, que debes practicar la identidad que el Señor de Señores te ha dado.